La dieta del genotipo es uno de los regímenes alimenticios más interesantes y completos que
hay, debido a su teoría avalada por grandes investigaciones. El Dr. Peter D'Adamo conocido
naturista, ganador de premios importantes y creador de la
dieta del genotipo,
la ha aplicado a sus pacientes por años, teniendo un alto grado de efectividad y sobre todo, una
permanencia en los resultados.
La dieta del genotipo se basa en el grupo sanguíneo de cada persona, así como
también en ciertos factores que hacen único al individuo. Este fue uno de los primeros doctores que
argumentó que cualquier dieta no es recomendable para todas las personas. Y trabajo por darle a
cada una de ellas, lo necesario para luchar contra la obesidad, dependiendo de características
personales muy particulares.
En la dieta del genotipo se dividen a las personas en seis genotipos
diferentes:
Cazador: personas altas, atléticas, con mucha energía, impulsivas y que
rara vez se enferman (debido a su sistema inmunológico que actúa siempre de manera eficaz). Sangre
de tipo «O».
Recolector: Un poco robustos pero sin problemas de sobrepeso, de
apariencia «grande», son normalmente personas cariñosas y muy simpáticas que gustan en ayudar a los
otros. Pueden llegar a ser amantes de la comida e ingerir grandes cantidades de esta. Sangre tipo
«O» y «B».
Maestro: Personas normalmente longevas, de carácter firme y con
disposición para enseñar. Con temperamento estable, estas personas suelen no presentar síntomas
cuando hay enfermedad. Sangre tipo «A» o «AB».
Explorador: Muy adaptable al medio, musculoso e innovador. No tolera los
vicios ni las sustancias dañinas. Puede tener cualquiera de los diferentes tipos sanguíneos.
Guerrero: Sumamente delgados de jóvenes y con alta tendencia a subir de
peso una vez que alcanzan la adultez media. Con una facilidad para presentar enrojecimiento en su
cara. Con tendencia al envejecimiento prematuro. Sangre tipo «A» o «AB».
Nómada: Constantemente tiene problemas musculares, suelen ser callados,
sin problemas con su alimentación y de estilo de vida estable. Sangre tipo «B» o «AB».
Las personas deben identificarse en alguno de estos seis grupos por medio de un
análisis y evaluación que conforma tanto su tipo de sangre como su factor Rh, medidas corporales,
índice de masa muscular, hábitos alimenticios y de vida en general, dientes, huellas digitales,
etc. Procesar toda esta información es tan complejo que el mismo creador de la
dieta del genotipo
ha creado software en el cual se introducen los datos del paciente, y se obtiene el tipo de
genotipo automáticamente, obteniendo resultados fidedignos.
De esta manera se proponen seis diferentes tipos de menús en la dieta del
genotipo. En los cuales se establece exactamente qué tipos de alimentos pueden consumir y cuáles
no, dependiendo del grupo al que pertenezcan. Aunque básicamente se toman todos los grupos
alimenticios, hay algunas restricciones en cuanto al consumo de mariscos, harinas, azucares,
derivados de la leche y grasas.
Alguna de las opiniones en contra de la dieta del genotipo argumentan que es una
dieta difícil de seguir debido a su complejidad en la preparación de alimentos, de igual manera
puede resultar cara, ya que las páginas oficiales que pueden dar mayor información son de pago. De
cualquier manera, el éxito que ha cosechado es indudable, por lo que sigue siendo una excelente
opción para alcanzar el peso deseado.